La respiración holotrópica, una técnica terapéutica desarrollada por Stanislav Grof, emplea la hiperventilación consciente y música evocativa para inducir estados alterados de conciencia.

Tanto en nuestra psique como en nuestro cuerpo, portamos huellas de distintos acontecimientos traumáticos que son origen de síntomas y perturbaciones diversas y que no podríamos elaborar en estados ordinarios de conciencia.

El uso consecuente de esta herramienta pone al descubierto los problemas en vez de encubrirlos, aumenta las posibilidades de llegar a una resolución auténtica de éstos y conduce no solo a una transformación personal, sino también a una apertura espiritual.

Su objetivo principal es promover el autoconocimiento y abordar problemas emocionales y psicosomáticos desde su raíz. Facilita la liberación de aspectos de la personalidad que obstaculizan el desarrollo de talentos y creatividad inherentes en cada individuo.

Esta herramienta revela y aborda problemas en lugar de encubrirlos, aumentando las posibilidades de una resolución auténtica y conduciendo a una transformación personal y espiritual.

Durante las sesiones de respiración holotrópica, se pueden experimentar sensaciones sensoriales, biográficas y perinatales, así como experiencias transpersonales que trascienden la identidad personal.